Tragedia en el puerto pesquero de Santander.

La tragedia vuelve a golpear al sector pesquero de Santander. El mar nos vuelve a jugar una mala pasada, ayer al mediodía, el barco "Nuevo Sotileza" se hundió cerca de la playa de Galizano. El accidente ha ocasionado dos heridos leves y un fallecido, todos vecinos del barrio pesquero. El fallecido es "Chechu" el patrón y armador del barco. Esta vez nos toca de lleno a los empleados de la Lonja, Chechu además de vecino y amigo, es el hijo pequeño de nuestro querido compañero y amigo "José". El mar, la mar ........

¿Por qué no funciona la nueva fábrica de hielo?

Un generador provisional y un depósito de gasóleo son lo que hace funcionar la nueva fábrica de hielo del puerto de Santander. ¿La instalación eléctrica donde está?. ¿Cumple la normativa ese depósito de gasóleo ahí instalado? ¿licencias municipales?. La nueva fábrica se inauguró a bombo y platillo antes de las elecciones y por el momento no funciona. Se pone en marcha de vez en cuando y se regala el hielo producido a los usuarios de la Lonja. Pescadores, mayoristas y minoristas reciben el hielo previa firma de un vale donde se dice que reciben el hielo gratis por estar la fábrica en periodo de prueba, ¿cumple los requisitos sanitarios entregar hielo producido en pruebas para uso en alimentos destinados al consumo humano? ¿registro sanitario de esa fábrica? ¿el funcionario de sanidad destinado en la Lonja (veterinario) avala esto? ¿qué empleados ponen en marcha y operan la nueva fábrica de hielo? ¿la fábrica es de la Consejería ó de la APS? ......

La Consejería, vía convenio de colaboración dotado de 300 mil euros de subvención, trata inteligentemente de colocar a dos de los antiguos empleados de la vieja fábrica de hielo en la nueva pero la APS (Javier Del Olmo) no quiere. La APS prefiere poner a sus empleados, gente sin ninguna experiencia en fábricas de hielo. La Consejería además de pagarlo todo (ha construido la fábrica y da 300 mil euros de subvención anuales) prefiere a profesionales que llevan un montón de años operando una fábrica de hielo. ¿Quién ganará el pulso?.

Llegó la esperada llamada, algo es algo ¿no?.

Después de ocho meses ha sonado el teléfono. Los cuatro trabajadores que se creían olvidados, han recibido la llamada de la esperanza. No hay oferta de trabajo, nada concreto todavía, pero al parecer los responsables de la Consejería les han informado de que ahora si se van a poner en serio manos a la obra. ¡Ojala que así sea!